El espíritu de la Navidad no es sobre regalos, es sobre estos 7 especiales momentos
La Navidad es una celebración increíble, pero cuando pensamos en ella, lo primero que nos viene a la mente son los regalos, ¿a poco no? Entre moños y papel con motivos invernales, hemos olvidado que hay momentos especiales que convierten a esta fiesta en el broche de oro del año.
Las risas, tradiciones y encuentros de esta época nos conquistan de maneras inesperadas y sin darnos cuenta, ¡ el espíritu de la Navidad se apodera de nosotras! Es tiempo de recordar por qué nos encanta esta temporada.
#1 La explosión de decoraciones
Un día había niños disfrazados pidiendo dulces de casa en casa, parpadeas y como por arte de magia aparecen las decoraciones. Nacimientos, velas que capturan a la perfección el olor a Navidad, guirnaldas con moños rojos, esferas de colores y uno que otro Santa adornando los jardines de los vecinos.
Pero el rey de la fiesta es el árbol. Sí, seguro después de pasar un par de horas tratando de desenredar las guías de luces lo único que quieres es un masaje en las manos, pero cuando ves el resultado final… ¡wow! Sabes que el esfuerzo valió la pena.
#2 Los colores que llenan la casa
Hay algo único en los colores de esta celebración; de inmediato te ponen en el mood Navideño, ¡y lo mejor es que todos combinan! Dorado, rojo, morado, verde y blanco. Tonos que se apoderan de esferas, guirnaldas, adornos y toda clase de objetos decorativos que dejan muy claro que la Navidad llegó a casa.
#3 ¡Obvio la comida!
Sí, nos cuidamos todo el año, pero cómo resistirse al poder de un ponche cuando hace frío, a las galletas que preparamos en familia, al pavo y los romeritos, al bacalao y las pastas de temporada, a los dulces, bombones y macarons que lleva la abuela a la cena de Navidad.
¡No se puede! Así que en vez de torturarnos, mejor apartamos un par de postres para llevar.
#4 Los olores de la temporada
No hay nada como llegar a casa y que huela a Navidad. Ese peculiar aroma entre canela, madera y calor de hogar. Una parte única de esta celebración, son las fragancias que podemos disfrutar durante el mes.
Desde los aromas que salen de la cocina de mamá, el distintivo aroma del árbol de Navidad, la fragancia a manzana que despiden las velas favoritas de la familia, hasta el dulce olor de nuestro postre favorito.
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#5 Despertar y no tener que ir a trabajar
No hay nada como despertar en casa el día de Navidad y saber que puedes quedarte en la cama un rato más. Si decides que la pijama será tu outfit no hay problema, al contrario, entre más cómoda mejor porque sabes que hay recalentado, tiempo en familia y para eso hay que tener la ropa adecuada.
¿Para qué pasar el día en tacones cuando puedes andar en casa con los calcetines más calientitos que tienes?
#6 Pasar tiempo con la familia
La Navidad es una de las celebraciones donde la familia se encuentra de verdad y es el momento perfecto para ponerte al tanto de lo que pasa con tus seres queridos (en caso de que ya no vivas con ellos) y de crear recuerdos especiales que los hagan sonreír más adelante.
Porque a esta fiesta llegan todos: la tía de los mil gatos, los primos “grandes”, la abuela consentidora, el tío cool, el papá bailador, el primer nieto y la sobrina que por primera vez presenta a su novio.
#7 Divertirte con tus hermanos y primos
Algo increíble de la Navidad es que los hermanos y primos pueden pasar más tiempo juntos y aunque la dinámica entre ellos implica una que otra pelea por el control de la tele, competencias por ver quién molesta más rápido al otro y uno que otro jalón de cabello; la verdad es que esta época no sería la misma sin esas complicadas pero muy divertidas interacciones.
La Navidad está cerca y es el mejor momento para recordar que hay mucho más que los regalos; sólo necesitamos disfrutar con todos nuestros sentidos de esta maravillosa fiesta, ¿no crees?